Melva
Sobreviviente de Linfoma
Ridgeway, SC
Soy sobreviviente de linfoma (de Hodgkin y no Hodgkin). Me diagnosticaron dos tipos de cáncer al mismo tiempo.
Cuando los médicos finalmente descubrieron lo que tenía, ya estaba en la etapa 4. Después de más de un año de tratamiento y un trasplante de células madre, puedo decir que ya no tengo cáncer. No lo digo muy fuerte, porque no quiero que reaparezca. Un médico incluso me dijo que iba a morir. ¡No me di por vencida!
Después de mucho buscar a un médico que pudiera ayudarme, adopté el lema: ¡Esto también pasará! Dios siempre estuvo y estará conmigo, incluso cuando los hombres se rindan. Me diagnosticaron en el 2004, y aquí estoy hoy día, de vuelta en mi trabajo, buscando una casa que pueda pagar y deseando empezar un grupo de apoyo para ayudar a los demás. La vida tiene un modo de hacerte sentir que todo terminó, que todo está decidido, pero Dios tiene un modo de decirte que te aferres a su mano firme y todo se solucionará. Cuando estás afligido por el cáncer, o cualquier enfermedad devastadora, eso hace que a veces otras cosas vayan mal en tu vida. Puede ser muy estresante y algunas personas no pueden soportarlo. Si fuera necesario, déjalas ir, ya que tu lucha podría no ser la suya. Me lo digo a mí misma pues, después de 31 años de matrimonio, ahora estoy sola y me siento muy bien. Repito, esto también pasará. ¡Vive, ama y sé feliz!